18 DE ENERO DE 1984
Jesús- La fe sólo puede renacer en las almas por la caridad: el ejemplo de Santidad del que recibió misión de intervenir. La intervención se limitara, en principio, a la oración fervorosa, que debe ser el centro de toda acción. La acción será toda paciencia, el enderezamiento toda dulzura.
Yo quiero las almas y no quiero perderlas por torpeza; si los caracteres no se prestan a la Obra de enderezamiento, que estas almas sean lo bastante humildes para comprenderlo y que eviten cuidadosamente unas heridas incurables a los que, Yo, su Dios, sólo quiero salvar por el Amor.
Enderezad con amor; evitad cuidadosamente dividir, los contrarios se afrontan; por un lado: el error, la herejía; por el otro: la santidad, el recuerdo frecuente del Amor Misericordioso. La Justicia tendrá su hora: Mi hora... No la de los hombres. Se impone la reflexión. No dividir, sino unir.
Libro: "Mensaje del Amor Misericordioso a las Almas pequeñas" - TOMO 3 - LAP Argentina - (393)
(almas_peq)
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