15 MINUTOS CON JESÚS

 DETRAS DE SUS HUELLAS

Hijo mío, no es precioso saber mucho para agradarme, basta que me ames de verdad.

Háblame sencillamente, como hablarías al más íntimo de tus amigos, a tu mamá o a tu hermano.

 ¿Necesitas hacerme en favor de alguien una ´suplica cualquiera?

Dime su nombre, ya sea el de tus padres, el de tus hijos, bien sea el de tu esposo/a, el de tus hermanos, amigos o conocidos: dime qué quisieras que haga Yo actualmente por ellos...

Háblame de los pobres a quienes quisieras consolar; de los enfermos a quienes ves padecer y quieres hacer algo por ellos; de los extraviados que anhelas ver volver al buen camino; de los amigos ausentes que quisieras volver a tener a tu lado.

Recuérdame que he prometido escuchar toda súplica que salga del corazón, y confiame a quien amas.

Y tu, ¿necesitas alguna gracia? Haz una lista de necesidades y léemela.

Dime sinceramente si sientes soberbia, orgullo, apego a la sensualidad, que eres tal vez egoísta, inconstante, negligente, esclavo de la moda, envidioso, interesado, pesimista, falto de fe y esperanza, perezoso, mentiroso, celoso, malo, mediocre, indeciso, malintencionado, mezquino, tibio, autosuficiente, intolerante, incomprensivo, apegado al dinero y a los honores, simulador, vicioso... y pídeme luego que venga Yo en ayuda de tus esfuerzos para cambiar.

No te avergüences. ¡En el Cielo hay tantos Santos que tuvieron esos mismos defectos!

Rogaron con humildad y poco a poco los libré de sus defectos.

Tampoco vaciles en pedirme bienes del cuerpo y del entendimiento: salud, memoria, perseverancia, éxito feliz en tus trabajos, negocios o estudios.

Toco eso puedo darte, y lo doy  y deseo que me lo pidas en cuanto no se oponga a tu santificación.

Hoy mismo, ¿qué necesitas? ¿Qué puedo hacer por tu bien?¡Si conocieras los deseos que tengo de favorecerte! ¿Traes entre tus manos algún proyecto? Cuéntamelo todo con confianza. ¿Qué te preocupa? ¿Qué piensas? ¿Qué deseas? ¿Qué puedo hacer por tus padres, por tus hijos,por tus hermanos?

¿Sientes acaso  tristeza o mal humor? Cuéntame. ¿Quién te hirió? ¿Quién te lastimó? tu amor propio? ¿Quién te ha menospreciado?

Acércate a Mi Corazón, que tiene bálsamo eficaz para todas 

las heridas del tuyo. Cuéntamelo y pronto me dirás que todo lo perdonas, todo lo olvidas, y en pago, recibirás mi consoladora bendición.

¿Tienes alguna alegría que contarme? Yo te la he proporcionado, ¿por qué no has de manifestarme por ello tu gratitud y decirme sencillamente Gracias? El agradecimiento trae consigo nuevos beneficios.

¿Tienes alguna promesa que hacerme?

Háblame con toda sinceridad. ¿Te has propuesto firmemente no exponerte más a  aquella ocasión de pecado; de privarte de aquel objeto que te hace daño, de no ver más películas y fotos que exacerban tu imaginación, de no tratar más aquella persona que turbó la paz de tu alma? ¿Quieres dejar todo lo que te aleja de Mi?

¿Volverás a ser amable con aquella otra persona a quien por haberte ofendido, has mirado hasta hoy como enemiga.?

Ahora bien, hijo mío, vuelve a tus ocupaciones habituales: al taller, ala oficina, al estudio, al consultorio, a tu casa con tu familia, pero no olvides los 15 minutos de conversación que hemos tenido hoy. Guarda en lo que puedas recogimiento, caridad con el prójimo y ama a mi Madre que es la tuya también. Vuelve mañana más entregado a Mí. En Mi Corazón encontrarás siempre Amor Y Consuelo .

TU Amigo Jesús

(Almas_peq)