En el nuevo lenguaje no se usa ya el término minusválido, se usa la expresión "persona con discapacidad". La persona discapacitada no es una máquina estropeada que hay que ajustar, sino una criatura a la que hay que ayudar a vivir, sin embargo, su vida es inmensamente más importante que su discapacidad.
Descubrir la otra persona siempre supone entrar en un mundo nuevo porque la discapacidad, en el fondo, no es otra cosa que manifestar una habilidad de una manera distinta.
La Iglesia llama a los discapacitados a ser maestros: leamos la carta de un hombre constreñído a la inmovilidad física, que sin embargo no ha permitido que la enfermedad paralizase sus ganas de vivir y su deseo de "contagiar" la alegría."Tengo 41 años. Dicen que de pequeño era muy guapo, pero estaba ya marcado por un mal terrible que me habría llevado a la inmovilidad más absoluta. Si fuese un tipo al que le gusta quejarse, explicaría todos los sufrimientos padecidos, todas las humillaciones... Pero no me gustaría entristecer a nadie, así que lo que me gusta es irradiar la alegría que Dios ha puesto dentro de mi. ¡Sería injusto que la guardase toda para mí!
No amo la Cruz por la Cruz... pero cuando llega, hay que hacer de ella un medio de salvación, una fuente de misericordia y perdón. Y esto sólo es posible si unimos nuestros sufrimientos a los de Jesús y si con él transformamos la cruz del dolor en cruz del amor... No soy héroe , ni un santo. Soy sólo alguien que se ha puesto en las manos de Dios y se ha dejado guiar...
Muchos pierden el tiempo buscando pruebas de la existencia de Dios y del alma, ¿pero no es la vida la mejor prueba?.
Querría ser el último en sufrir,pero desgraciadamente no es así.
Pero estoy contento de "ser"(existir) porque nada me impide desear el bien, amar.
Y por eso bendigo al Buen Dios que me ha creado para el amor...Experimento el gozo de existir, porque no siento sólo que viva sino que siento que poseo la vida, mi cuerpo vive; ¡pero mi alma posee la Vida!"
Muchas veces me han dicho, intentando consolarme: "Querido hijo, ¿qué quieres hacer? Este ha sido tu destino. Cada uno nace con su destino; tú has tenido una mala estrella".
Pensando que me consuelan, en realidad me humillan, me quitan hasta la libertad, me reducen a un títere, víctima de un titiritero cruel que se divierte, o que ha decretado que yo sufra.
Sin embargo todo hombre está llamado al sufrimiento porque todo hombre está llamado al amor.Así, es en el sufrimiento cuando uno muestra si ama o no.
Muchas veces me pregunto el porqué de tanto dolor y de tanto sufrimiento. Pero ni el mismo Jesús ha querido aclarar este misterio. Él no ha venido a aclarar o explicar el dolor, ni para quitarnos el sufrimiento.
Él nos ha enseñado únicamente la manera de utilizarlo, para hacer de él un medio de salvación y conversión
Y yo creo que más importante que comprender es amar
Pero, ¿qué queremos hacer de este sufrimiento?
¿Lo convertiremos en un fardo pesado que amargue nuestro corazón? ¿Haremos de él una visera que nos impida ver el sufrimiento de los demás? ¿O diremos a Jesús:
"Escucha, Jesús, tengo aquí una gran cantidad de sufrimiento. Está estorbando a mi alma y sofocando mi corazón. ¿Por qué no lo tomas Tú, por qué no lo haces tuyo?
Si me lo guardo se convierte en un montón de basura, y ami no me gusta estar sobre un montón de basura. Si te lo doy, si lo uno a tu sufrimiento, entonces sé que no se perderá y el mío no será un sufrimiento inútil, porque Tú harás de él un medio de redención y salvación.
En si y por si misma, mi enfermedad es vacío y angustia, Tú la convertirás en luz y alegría, es encierro, y Tú harás de ella libertad."
"Jesús, te pido una cosa: no permitas que mi corazón se encierre en sí mismo y que yo de vueltas siempre en torno a mi dolor, como un perro atado, que gira siempre en torno al gancho que lo fija al suelo. Levántame, Jesús, en tus brazos, levántame tan alto que vea el sufrimiento del mundo"
Luigi Rocchi
UN HOMBRE CON EL VICIO DE LA VIDA Y DE LA ALEGRÍA
¿Y TÚ, LOS COMPRENDES, O LOS AMAS?
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