POESÍA DE EMMA MARGARITA R.A.- VALDÉS
LA MUERTE
Se desvela el enigma de la vida
en las últimas ráfagas de tierra,
telaraña de aurora que se cierra,
sobre el dolor abierto de la herida.
El laberinto azul es avenida
y un imán amoroso nos aferra
revelado en la mágica partida.
Muertos lazos se van desanudando
y sus cintas flamean en el viento,
el recuerdo es un sueño, un lamento,
estertores del ser resucitando.
A lo lejos la luz alboreando,
en las ondas de un nuevo pensamiento
despoja de la niebla al firmamento
con la eterna verdad que está triunfando.
Amanece el rocío en el jardín, en la rama la tórtola zurea,
el abrazo en las nubes aletea
y enmudece el aullido del mastín
Se ha pasado de golpe el balancín
que agitaba el fragor de la marea
y una espiral de dársena ondee
en arpegios de antiguo clavecín.
Lejos de la crisálida, en la huella
que emite claridades, se estremecen
impulsos ancestrales, se ensombrecen
las rutas luminosas de la estrella.
Un coloquio de soles firma y sella
el pacto celestial, voces que ofrecen
los rayos de pasión de la centella.
Atravesando pórticos de gloria
se alcanza el paraíso universal
se vive el espectáculo final,
se recupera atónica memoria.
Del libro: "Versos de Amor y Gloria" - Biblioteca de autores cristianos (BAC)
Emma Margarita R.A. -Valdés.-
(almas_peq)
No hay comentarios:
Publicar un comentario