DIOS ILUMINA MI OSCURIDAD.

9. PEDIR LUZ PARA EL CAMINO

"Yo cuento contigo. Muéstrame el camino que he de seguir, porque estoy atento a ti" 
(Sal. 143, 8 )


"Tú, Señor, eres mi lámpara, mi Dios que ilumina mi oscuridad"
(Sal. 18,29)


"Yo soy la luz que vino al mundo, para que
todo el que crea en Mi no camine en 
las tinieblas".
(Jn 12, 46)

 Para poder caminar con entusiasmo a lo largo del día, uno tiene que saber adónde quiere llegar. Cuando uno no sabe lo que quiere y no está seguro de sus decisiones, entonces no tiene certeza de estar haciendo algo que valga la pena y siente que está gastando sus energías inútilmente. Por eso no tiene entusiasmo.

Para apasionarse con una misión o un trabajo, uno tiene que estar seguro de que esa misión es lo que Dios realmente quiere.

El sabe más que yo qué es lo mejor para mi mi vida. Él sabe para qué estoy hecho. Por eso es tan importante pedirle luz al Señor para descubrir su voluntad, el plan que Él tiene para este día que estoy comenzando.

Leer su Palabra y buscar su luz es lo mejor que podemos hacer para descubrir si nuestras decisiones son correctas. Y cuando no terminamos de ver claro, es fundamental pedir consejo, escuchar distintas opiniones de personas sabias. El Señor también habla a través de los demás.

También podemos pedir luz en la oración para encontrar el lado bello de nuestras tareas y de todo lo que nos toque vivir a lo largo del día o de la semana. Si las cosas que tengo que hacer no me entusiasman, debería detenerme un momento a orar, hasta que descubra la hermosura de esa tarea y sienta que el Espíritu Santo ha estimulado mi corazón para la entrega. Es bueno tratar de mirar las cosas como Dios las mira, con sus ojos de amor.

ORACIÓN

*Señor, Tú eres la verdadera luz.

Tú me conoces a fondo

*y sabes perfectamente

qué es lo que me conviene.

*Yo muchas veces me confundo,

o tomo decisiones apresuradas

*que luego me perjudican

o perjudican a los demás.

*Dame la gracia de aprender

a consultarte, para no desgastar

mi vida inútilmente.

*Ilumina mis pasos

y guíame por el camino correcto.*

Amén.-

"Cómo Em pezar un Buen Día"- Víctor Manuel Fernández - Ediciones Paulinas - (39-40-41-42)

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