domingo, 19 de mayo de 2013

Víctima de sus propias obsesiones.



<<...Otra forma de autodesprecio consiste en someternos sin condiciones a las apreciaciones y juicios de los demás, sin tener en cuenta el precio que ello puede suponer, lo que conduce con frecuencia a la negación y destrucción de uno mismo y, a la postre, a exponerse al riesgo de convertirse en víctima de sus posibles abusos. En ese sentido, es conveniente reconocer que frecuentemente reaccionamos con exageración ante las críticas nimias de los demás, tomándolas demasiado en serio y olvidándonos de las cosas importantes de la vida, aquellas que tienen efectos profundos sobre nuestra vida a largo plazo. Al proceder de este modo, caemos en la trampa de asentarnos de manera sesgada y superficial en nuestra negatividad, regulando nuestra vida a partir de los mensajes de los demás, muchas veces emitidos con escasa consciencia de lo que dicen y que, por nuestra parte, abultamos desproporcionadamente,
alterando nuestra posible felicidad...>>

Fuente: J.A.Bernard - "Desarrollo de la armonía Interior. Bilbao 2000, (222-223)


(almas_peq)

No hay comentarios:

Publicar un comentario