LA ESPIRITUALIDAD DE:
SAN JUAN DE LA CRUZ
SAN JUAN DE LA CRUZ
Nuestra gran tentación acerca de las personas,
lugares y cosas en nuestras vidas,
es hacerlos el comienzo y el fin de nuestro gozo.
Pero sólo desapegándonos de ellos,
podemos llegar a un modo de gozarnos en ellos
que no bloquee nuestra subida a Dios.
Hay un abismo de diferencia
entre el gozo de aquél
cuya meta es poseer
y acumular cosas,
y el gozo de quien ve en las cosas
no algo a lo que hay que rendirse,
sino algo que debe ser entregado.
Es la diferencia
entre ver el verdadero bien
en las personas lugares y cosas,
y aferrarse a ellas
por lo que son en sí mismas.
El verdadero gozo en las cosas
conduce a la generosidad.
El falso gozo
termina en posesión,
que, a la vez,
termina en ser poseídos.
Desapegándonos de las cosas
las poseemos en libertad;
cuando nos aferramos a ellas,
nos convertimos en sus cautivos.
El gozo de la creación
deja así de ser gozo.
<< En la verdad se encuentra el gozo>>
Fuente: "No temas a la noche" - Jhon Kirvan- Editorial San Pablo - Bs As.(190)


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