miércoles, 22 de febrero de 2012

OFRECIMIENTO DE VIDA

PROMESAS DE LA SSMA. VIRGEN A QUIÉNES LA HAGAN


 La Santísima Virgen favoreció con abundantes locuciones y visiones extraordinarias, durante varios años a Sor María Natalia Magdolna (1901-1992), religiosa húngara, nacida cerca de Pozzony (en la actual Eslovaquia) perteneciente a la Congregación de Hermanas del Buen Pastor de Sta. María Magdalena en Keeskemet.


Su vida estuvo llena de gracias sobrenaturales y de una intensa comunicación con Dios. Murió en olor de santidad, siendo de edad ya avanzada.


Las promesas que a continuación ofrecemos, están entresacadas de varios mensajes que Jesús y María le comunicaron, y que fueron editados en el libro "La Victoriosa Reina del Mundo", por Ediciones Xaverianas S.A. de C.V.- Avenida Juan Palomar y Arias 694- Prados Providencia - A.P. 1/33-44100 Guadalajara, Jalisco. México.-


El Padre Jeno Kraszany, Director Espiritual de Sor María Natalia por algún tiempo, renombrado teólogo europeo y Auxiliar del Obispo Istvan Hasz, declaró verídicas estas experiencias místicas, así como las visiones y mensajes, tras un largo período de investigación y examen.


EL MENSAJE DE LA VIRGEN


Nuestra Madre Celestial pide, en especial a las madres de familia que ofrezcan por amor, su vida a las intenciones de su Inmaculado Corazón, para Ella poder ir salvando más y más familias de caer en el infierno.


La misma Virgen lo concreta:
"En el corazón de muchas madres arde el dolor. Se les oprime el corazón, por el estado espiritual de sus hijos, por su conducta inmoral, por el destino de sus vidas más allá de la muerte. Por amor hacia ellas, movida de compasión, alcancé con mis ruegos las cinco promesas.¡Que se consuelen, que ofrezcan con una entrega total todos los sucesos de la vida!"


Para este fin, propone el Ofrecimiento de Vida, que debe hacerse con rectitud y seriedad, ofreciéndolo para mayor Gloria de Dios y bien de la Santa Iglesia.
Y nos anima a ello, brindándonos unas promesas grandísimas, que alguien no ha dudado en catalogar como de las más excelsas que ha hecho María Santísima hasta ahora. ¡No las despreciemos!


APROBACIÓN ECLESIÁSTICA


La divulgación, tanto de los mensajes y revelaciones, como de las Promesas y el ofrecimiento de Vida, gozan de competente licencia de la Jerarquía Eclesiástica de la Iglesia.
Monseñor Gabriel Díaz Cueva, Aux. de Guayaquil (Ecuador), con la fecha 16 de Julio de 1987, extendió el imprimi Potest a la difusión de estas manifestaciones divinas.
Asimismo ha sido concedido diligentemente el Imprimatur el día 15 de Junio de 1988, por el P. Agustín Gutiérrez, Vicario General de la Archidiócesis de Guadalajara.


El Nihil Obstat fue expendido por el Padre Alberto Valenzuela, S.J., Censor, delegado a tal efecto.


PROMESAS A QUIENES HACEN EL "OFRECIMIENTO DE VIDA".


1- Nadie de sus familiares caerá al infierno, aún cuando las apariencias externas lo harían suponer; porque antes de que el alma abandone el cuerpo, recibirán la Gracia del perfecto arrepentimiento.


2- En el mismo día del ofrecimiento, saldrán del Purgatorio todos los difuntos de su familia.


3- En la muerte estaré a su lado y llevaré sus almas a la Presencia de Dios, sin pasar por el Purgatorio.


4- Sus nombres estarán inscriptos en el Corazón de Jesús y en el Corazón Inmaculado de María.


5- Salvarán a muchas almas de la eterna condenación, por este ofrecimiento, unido a los méritos de Cristo. El mérito de sus sacrificios beneficiará a las almas hasta el fin del mundo.






OFRECIMIENTO DE VIDA

Mi Amado Jesús:
Delante de las Personas de la Santísima Trinidad,
Delante de nuestra Madre del Cielo y toda la Corte Celestial, ofrezco según las intenciones de tu Sacratísimo Corazón Eucarístico y las del Inmaculado Corazón de María Santísima, toda mi vida, todas mis Santas Misas, Comuniones, buenas obras, sacrificios y sufrimientos, uniéndolos a los méritos de tu Santísima Sangre y tu muerte de Cruz:

* Para adorar a la Gloriosa Santísima Trinidad

*Para ofrecerle reparación por nuestras ofensas.

*Por la unión de nuestra Santa Madre Iglesia.

* Por nuestros sacerdotes.

* Por las buenas vocaciones sacerdotales.

* y por todas las almas hasta el fin del mundo


Recibe Jesús mío, mi ofrecimiento de vida y concédeme gracia para perseverar en él fielmente hasta el fin de mi vida . Amén.


No hay comentarios:

Publicar un comentario