martes, 31 de enero de 2012

TÚ ME ABRES UNA SALIDA.

7. DESCARGAR TODO EN SU PRESENCIA


"Señor, en la angustia Tú me abres una salida"
(Sal.4,2)

"Ante Él derramo mi lamento ante Él expongo mi angustia"
(Sal.142,3)

¿Qué es lo que me está preocupando?
Hay algo que me produce temor, angustia o ansiedad cada vez que me levanto, cada mañana. Hay algo que no me deja vivir con entusiasmo cada día y cada momento. Si es así, Dios me invita a descargar en Su Presencia eso que me inquieta.
"Descarga en el Señor tu peso" (Sal 55,23) , "Confía a Dios todas tus preocupaciones" ((1 Ped 5,7).
"¿Alguno de ustedes está afligido? Que ore".(Sant 5,13). Es más, la palabra de Dios me invita a pedir sin dudar, con la seguridad de que la súplica, de una forma o de otra, será escuchada (cfr. Mc 11, 24 Sant 1, 7-8). Por eso, luego de una súplica sincera y confiada, no queda más que estar en paz y comenzar el día con entusiasmo.
Eso que me inquietaba ha quedado en las manos de Dios, y entonces Él se ocupará. Yo enfrentaré las dificultades que aparezcan y buscaré soluciones, pero sin obsesionarme, porque es Él quien sabe qué es lo mejor y Él me dará una salida: "Aunque pase por oscuras quebradas no temeré ningún mal, por que Tú vas conmigo" (Sal 23,4).
Por eso, aunque yo no sepa de qué manera concreta terminará todo, y aunque yo no pueda controlarlo todo, y cumplir mis propios proyectos, lo que sé es que todo terminará como realmente conviene que termine.
Y si tengo temor de encontrarme con algunas personas que pueden molestarme o hacerme daño, puedo comenzar el día orando por esas personas, pidiendo al Señor que toque sus corazones para que me miren con buenos ojos, para que no me envidien y para que podamos tener una relación serena.
Esto me ayuda a vivir un día más sereno, feliz y esperanzado: "Señor, temprano ya escuchas mi voz. De mañana yo te expongo mi causa y espero tu respuesta" (Sal 5,4)

ORACIÓN

*Dios mío, aquí estoy ante Ti para empezar
un nuevo día. Pero hay cosas
*que despiertan temor y preocupación
dentro de mí, y también hay desafíos
que tengo miedo de enfrentar. Hay cosas
*que comienzan a angustiarme
sólo porque las imagino. Por eso quiero
*entregarte esas preocupaciones, Señor,
y rogarte que seas Tu el único dueño
y Señor de todo lo que me atemoriza.

*Guía mis pasos, Señor, protégeme de todo mal
 en este día, no permitas que nada
*ni nadie me haga daño. Cuida mi salud,
mi cuerpo, mi hogar, protege todo lo que amo
y me preocupa. Y concédeme que todo lo que tengo
*que enfrentar termine bien.
Yo me decido a comenzar este día sabiendo que
*Tú llevarás cada cosa a un buen final, porque
todo queda ahora en tus buenas
y poderosas manos. Tú me dijiste que todo
*lo que te pidiera con fe me lo concederías.
Sin Ti nada puedo. Necesito de Ti, Señor
*Por eso me quedo en tus brazos,
*con toda mi vida, lleno de confianza.
Amén.* 



"Cómo empezar un buen día" - Víctor Manuel Fernández - Edic. Paulinas (33-34-35)

No hay comentarios:

Publicar un comentario