domingo, 27 de mayo de 2012

CONFIADOS Y ACUNADOS POR LA CERTEZA...

SAN  BENITO

A diferencia de las espiritualidades del siglo XIX, que tanto han marcado nuestra evolución, los doce grados de la humildad no se basan en una teología del mérito. Benito, en otras palabras, no nos instruye en el sutil arte de <<ganar>> a Dios o <<merecer>> a Dios u <<obtener>> a Dios. La espiritualidad benedictina se basa simplemente en el reconocimiento de que Dios está presente en todos nosotros. Aquí y ahora. La espiritualidad benedictina se basa en el presupuesto de que no necesitamos pasar las horcas caudinas para llegar a Dios. Por el contrario, nos limitamos a hacernos conscientes de que Dios está con nosotros, y entonces somos capaces de pasar bajo cualquier horca caudina de la tierra confiados y acunados por esa certeza.
Una vez sabemos que Dios está con nosotros, como enseña Benito, podemos aceptar una dirección espiritual que nos lleve al autoconocimiento, nos ponga en paz con el mundo que nos circunda, nos faculte para convertirnos en parte discente de la comunidad humana y, finalmente, nos abra amorosamente a todos en la vida. Entonces, una vez que hayamos aceptado a Dios, a nosotros mismos, nuestro entorno y a las personas que nos rodean tal como son -dice benito- llegaremos a la paz interior, que es signo de una vida vivida como es debido...

Fuente: "Doce pasos hacia la libertad interior" - (15).

(almas_peq)


No hay comentarios:

Publicar un comentario